Receta espectacular para recibir amigos en casa y no tener que estar encerrada en la cocina.
Confieso que esta receta se la robé/adapté a una amiga. Me la pidieron un montón y me apuré a sacar la foto y compartirla con ustedes en un día muy especial. Hoy justo homenajeamos a sus padres, los mejores anfitriones que conocí. Pienso en ellos y solo puedo escuchar el sonido de alegría, música, charlas y largos encuentros en su casa. Cuando éramos chicas, con mis amigas escondidas en la cocina picando lo que pasaba, de más grandes como protagonistas o sumándonos al evento del momento. Así que mi tributo hoy es una receta ideal tener lista y sentarte a disfrutar de la charla con amigos.
✔️Para empezar creo que esta bondiola tiene tantas versiones como cocineros. Les paso la mía, que va variando cada vez que la repito:
1. Sacar la carne de la heladera un rato antes para que quede más tierna. Pueden macerarla un poco, embadurnarla en mostaza o usarla directo.
2. Dorar en una asadera cebolla y ajo picados chiquitos junto con la carne.
3. Sacar del horno y ponerse creativos: mucho vino blanco (o cerveza negra), salsa de soja, jugo de naranja, hierbas, miel, mostaza, barbacoa,… lo que se les ocurra.
4. Tapan con papel aluminio para que quede bien hermético y lo cocinan a mínimo de 3 a 4 horas. Cada tanto recomiendo abrir, chequear que tenga suficiente líquido, dar vuelta y seguir. Si lo van a hacer con anticipación antes de calentar agreguen más líquido. La primera vez le erré y me quedó seca.
5. Antes de servir desmenuzan con un tenedor (o cuchara porque así de tierna queda) y mezclan con la salsita.
6. En la mesa pueden sumar diferentes salsitas como criolla, palta, queso crema, etc.